Directores Contemporáneos
Spike Jonze: Her.
Dan Gilroy: Nightcrawler.
Por Betsy Mares
En la entrega de esta semana estaré hablando de dos realizadores, cuyas obras brindan el material necesario para plantearnos interesantes preguntas sobre la sociedad en la que vivimos o en la que potencialmente nos podríamos convertir. Ambas cintas tienen en común que exploran ciertos aspectos de la experiencia humana de manera interesante, aunque con enfoques y temáticas muy contrastantes.
Spike Jonze
Nacido en Estados Unidos, él es productor, guionista, director y actor; ha tenido una carrera bastante versátil, pues Jonze se ha desempeñado en diversas plataformas comunicativas, entre ellas el cine, la televisión, videos musicales y comerciales. Su producción como director de cine ha sido muy bien recibida por la crítica, sin embargo al tratarse en general de pequeñas producciones no muy publicitadas, los números en taquilla de sus largometrajes han apenas compensado el en sí bajo presupuesto. Being John Malkovich (1999) fue su ópera prima, a la que le siguió Adaptation (2002), los guiones de ambas películas fueron escritos por Charlie Kaufman; a partir de ese punto, Jonze comenzó a escribir los guiones de los filmes que dirige, estos son Where the Wild Things Are (2009) y Her (2013). Es esta última a la que me referiré.
Her (2013)
Esta es la historia de Theodore (Joaquin Phoenix), un hombre sensible y deprimido por su divorcio que trabaja en un negocio donde escritores profesionales escriben cartas por encargo. Sus amigos intentan animarlo a salir con nuevas personas, pero el se siente inseguro y dolido. Theodore compra el más nuevo sistema operativo, el cual es una inteligencia artificial llamado Samantha que se adapta y evoluciona; en su soledad, Theodore platica ávidamente con Samantha, esta resulta ser divertida, encantadora y curiosa, además lo apoya constantemente en su vida, es así como ambos desarrollan una relación muy particular.
Para contarnos esta peculiar historia de amor, el guión se vale de algunos toques de ciencia ficción (inducidos al hablar de una inteligencia artificial). En primera instancia, la premisa podría sonar muy extraña y sería fácil juzgar a Theodore, aunque la historia va más allá y profundiza, de manera que te das cuenta de que nuestra vida llena de tecnología, en cierto sentido, no está muy lejos de esta ficción. No es este el único punto a considerar con el que te deja la obra de Jonze, pues también nos hace cuestionar nuestras relaciones sentimentales, por ejemplo, la parte de la monogamia.
Las actuaciones aquí son un factor importante, Phoenix entrega un personaje simpático y dulce por quien esperas lo mejor, mientras que Scarlett Johansson hace un trabajo sobresaliente dando voz a Samantha, pues transmite una gran gama de emociones. Esta película es muy graciosa a momentos (principalmente, gracias a personajes secundarios), pero en general tiene un tono melancólico e íntimo, que es reforzado por la música de Arcade Fire y una cálida y bella cinematografía.
Dan Gilroy
Es un director y guionista estadounidense. A lo largo de su carrera se ha desempeñado casi exclusivamente como guionista, él mismo escribió el guión para Nightcrawler (2014) que es la primera cinta donde funge como director. En sus proyectos como guionista podemos observar cierta inclinación por historias con cierta carga de ciencia ficción o fantasía y destacan largometrajes como Real Steel (2011) y The Bourne Legacy (2012), en este último colaboró con sus hermanos Tony y John Gilroy.
Nightcrawler (2014)
Louis Bloom (Jake Gyllenhaal) roba materiales de construcción, ataca al guardia que lo descubre y le roba su reloj, es así como comienza la película. Después, él se topa con un accidente automovilístico, se interesa en las personas que graban o toman fotografías de la escena para venderlas a los medios y decide dedicarse a eso. Louis demuestra su determinación adquiriendo el equipo necesario e incluso contrata un asistente, además se muestra competitivo y negocia fuertemente con las estaciones de medios. Sin embargo comienza a cometer crímenes al alterar las escenas con las que se encuentra o allanando casas.
Al igual que en Her nos encontramos con un protagonista solitario cuyas acciones son fáciles de adjudicar a un desorden mental, sin embargo, a pesar de tratarse de filmes muy diferentes con temáticas distintas, lo que tienen en un común es que estos personajes no son más que la consecuencia de la sociedad donde viven, una sociedad en la que también nosotros vivimos. La triste verdad es que los actos amorales que comete Lou no tendrían lugar si estos no fueran recompensados, o sea, si él estuviera en un mundo donde los medios amarillistas no tuvieran la gran influencia que tienen, y donde la sangre no vendiera tanto como lo hace por el morbo del público .
Sin duda, el personajes de Lou es uno muy interesante y la destacable actuación de Gyllenhaal lo complementa de maravilla, lo vuelve muy real; este es un hombre que puede llegar a ser bastante tenebroso en su manera de obrar, una sensación acentuada por el ritmo frenético que toma por momentos, un suspenso bien manejado que no te deja parpadear y el hecho de que la mayor parte de la cinta toma lugar en escenarios nocturnos.
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